El historiador colombiano esboza en este ensayo cuales podrían y deberían ser las orientaciones de l@s educador@s crític@s impulsados por una ética humanista.
Me cabe la satisfacción de prologar un libro original, que relata las luces y sombras, el ingenio y la simpatía de trabajadores con particularidades...
Es una aportación más que hago, antes que el olvido me llegue y la lucidez no se haya marchado, en el entendido que no existe una historia, sino muchas que deben ser escritas, leídas, contadas y escuchadas.