Ortega ya no es sandinista. Es un dictador reaccionario. Su traición ensucia las banderas rojinegras, democráticas y progresistas del FSLN, de los años ochenta. Terminará, como Somoza, en el...
El lamentable espectáculo de expulsar y retirar la nacionalidad tanto a adversarios polÃticos como a ciudadanos que hicieron uso de sus libertades de expresión...