Entonces, la cumbre Xi-Putin selló definitivamente a China-Rusia como socios estratégicos integrales a largo plazo, comprometidos a desarrollar una competencia geopolítica y geoeconómica seria con las potencias hegemónicas occidentales...
Se está formando una nueva realidad: el mundo unipolar se está convirtiendo irrevocablemente en una cosa del pasado, está tomando forma uno multipolar.