Ni Donald Trump ni Joe Biden entusiasman al electorado en Estados Unidos: un sondeo nacional de Decision Desk HQ/NewsNation señala que el 59 por ciento de los votantes empadronados no están entusiasmados o nada entusiasmados con una revancha entre las obstinadas candidaturas de los “gerontes”, mientras crece la desilusión y el rechazo.
A pocos meses de las elecciones, el republicano lidera las encuestas más por descrédito del demócrata que por mérito propio, mientras el electorado, en especial el más joven, manifiesta su desesperanza: no divisan un futuro mejor.
Biden ve caer sus posibilidades a medida que insiste con su política belicista en Ucrania y Medio Oriente y descuida prioridades de los jóvenes y las mujeres. La medición de Bloomberg/Morning Consult, constató que el 58% de los votantes de importantes estados de la Unión tienen «una percepción negativa de Biden» y creen que Trump podría manejar mejor lo relativo a la economía.
Los medios y las encuestadoras han optado por no profundizar sobre asuntos tan delicados como la salud mental de Biden, que repetidamente da muestras de desequilibrios que hacen aconsejable que abdique de su capricho de pelear por la reelección. Pero los medios no han tenido reparos a la hora de hablar y escribir sobre las causas judiciales que tienen a Trump en el centro de acusaciones que van desde golpismo hasta sobornos y actos de corrupción sexual.
A los principales líderes demócratas de ambas cámaras legislativas no les agradan las apetencias reeleccionistas de Biden, pero mantienen fidelidad al presidente y se abstienen de comentar sobre sus crisis neurológicas. Pero muchos de ellos hablaron de rendición y entrega de los principios cuando se supo hasta dónde Biden estaba dispuesto a ceder para que los republicanos le votaran en el Congreso un fenomenal aumento de las partidas bélicas para Ucrania e Israel.
Eran 106 mil millones de dólares que los republicanos negaron, pese a que el presidente llegó a ofrecerles hasta la revisión de la histórica posición demócrata ante el exilio, los migrantes y los perseguidos políticos.
La creciente oposición de los trabajadores y jóvenes a la política de Biden en su respaldo incondicional a Israel es políticamente peligrosa, ya que los sindicatos son claves para el apoyo al presidente, quien busca otro mandato. Esa política oficial también está minando el soporte a Biden entre jóvenes, comunidades musulmanas y árabe-estadunidenses en estados claves del mapa electoral como el caso de Michigan.
Los analistas están preocupados por el camino que elijan los jóvenes de entre 18 y 34 años, un grupo históricamente clave para el partido Demócrata. De las enecuestas surge que empieza a verse un tímido pero persistente corrimiento hacia la ultraderecha.
A esos jóvenes no les entusiasma la oferta de Biden -no le creen- de condonar las deudas estudiantiles. Tienen trabajo pero no están conformes. Entre ellos predomina la crítica a la obcecada y costosa aventura guerrera en Ucrania, a la que se agrega desde octubre pasado un reforzamiento sin límites de la asistencia militar –armamento y pertrechos– a Israel, el gran socio de Medio Oriente.
El 94 por ciento de los demócratas de menos de 30 años quieren que alguien más sea su candidato. La tasa de aprobación del presidente estadounidense es considerablemente baja entre los simpatizantes de su partido: 33%, segun The New York Times. Pese a que la tendencia es clara, Biden insiste con su política guerrera que, esta vez, los norteamericanos rechazan.
En julio pasado, Biden dijo que las armas de fuego están convirtiendo los barrios estadounidenses en “campos de exterminio” y se comprometió a restablecer la prohibición de los fusiles de asalto. “En los últimos años, nuestras escuelas, lugares de culto, centros de trabajo, tiendas, festivales de música, discotecas y tantos otros sitios cotidianos se han convertido en campos de exterminio”, aseveró.
Citó entonces los tiroteos que dejaron 19 niños y dos profesores muertos en la escuela primaria de Uvalde (Texas), 10 muertos en un supermercado de Búfalo (Nueva York) y siete muertos en un desfile del 4 de julio en Highland Park (Illinois).
Sondeos y más sondeos
Los sondeos señalan que si se votara hoy, el 47% del electorado de Arizona, Georgia, Nevada, Pensilvania, Wisconsin, Michigan y Carolina del Note lo haría por Trump, mientras el 42% lo haría por Biden. Esta es la primera vez que el presidente aparece perdiendo en esos distritos y los analistas señalan que cayendo allí no puede soñar con la reelección.
Una mayoría del Congreso en Washington aún presta apoyo incondicional a la política internacional de Biden, que incluye bloquear cualquier intento de imponer un alto el fuego, pero unos 60 legisladores de la cámara baja han escrito al secretario de Estado exigiendo que el gobierno se oponga de manera tajante a la expulsión de palestinos de Gaza que varios líderes israelíes han señalado como su objetivo.
El ex presidente Barack Obama, advirtió a su ex vicepresidente Biden sobre la erosión de apoyo entre los jóvenes: la verdad es que no sólo necesitamos que los jóvenes voten en noviembre, requerimos que trabajen duro, se pongan en la fila, llamen a sus amigos y se entreguen plenamente en esto.
Los trabajadores
El sindicato nacional de trabajadores de servicios SEIU, con dos millones de agremiados, llamó por un alto el fuego inmediato en Gaza, sumándose a millones de maestros, trabajadores automotrices, defensores de derechos humanos, organizaciones progresistas judías y musulmanas, entre otros activistas y artistas que exigen el fin a la guerra y el genocidio de Israel contra los palestinos, denunciando incluso la complicidad de Estados Unidos con lo que califican de crímenes de guerra.
El sindicato, que agremia desde trabajadores de salud hasta los de limpieza y mantenimiento de edificios, enfocó su condena en las ofensivas militares de Israel sobre civiles y la crisis humanitaria que eso está desatando en Gaza, al subrayar que agremiados de SEIU se ven reflejados en los trabajadores de salud en Gaza.
El SEIU se sumó al sindicato automotriz nacional UAW con sus 350 mil agremiados, que en diciembre endosó los llamados internacionales por un cese al fuego, junto con varias secciones de sindicatos de magisterio en Chicago, San Antonio, Portland y Oregon, entre otros. Lo cierto que jugando a la política, parte del liderazgo nacional de varios sindicatos aún no se han atrevido a pronunciarse.
Los estibadores sindicalizados en California, que se han negado a cargar o descargar buques destinados a Israel, y el sindicato electricista United Electrical Workers, ha llamado por un alto el fuego inmediato. Activistas árabe-estadunidenses, musulmanes y judíos -tanto dentro de los sindicatos como por medio de varias organizaciones-, han estado impulsando las demandas en apoyo al fin de la guerra como para presionar al gobierno de Joe Biden a frenar su envío de armas a Israel.
If Not Now (Si No Ahora), agrupación activista de jóvenes judíos desplegó una manta de más de 15 metros desde la famosa torre sobre un colina en San Francisco con el mensaje: Judíos dicen: dejen que viva Gaza, y corearon “no en nuestro nombre”.
El 64% de los demócratas no quieren que Joe Biden sea el candidato presidencial del partido en las elecciones de 2024, por su edad -tendrá 81 años en ese momento- y por la marcha actual de la economía, mostró una encuesta realizada por The New York Times y el Siena College.
Pero lo cierto es que el octogenario presidente sigue siendo el político mejor valorado del partido Demócrata, pese al rechazo: el oficialismo carece de una figura convocante.