La Lira Popular Virtual
El Encargado…

El “Encargado” visto por la Lira Popular virtual… Juan Guadó el ‘presidente Guiado’ por control remoto

Resulta que en Venezuela
un Guasón se autoproclama
y el Cártel de Lima(1) inflama
como polilla en la vela.
El Imperio(2) se desvela
azuzando a sus peones:
se agolpan ya los bufones
por si agarran un despojo
y desfilando de hinojos,
realizan sus abluciones.

No parece mala idea
de aplicar por estos lados:
que haiga en Chile un “encargado”
y –¿por qué no?– una Asamblea.
Alguien que dé la pelea
que no dieron los partidos;
que defienda al preterido
que marcha por la Alameda
con lo poco que le queda,
cabizbajo y abatido.

El problema en este Chile
es que no hay un “encargado”:
toditos se hacen a un lado
toititos se hacen los giles.
Picaneada en los cuadriles,
discutiendo payasadas,
va la gente despistada
de los problemas reales:
con fútbol y festivales
la mantienen ocupada.

Imagine un “encargado”
que se encargue de enrielarnos;
que no decida engañarnos
después que lo hemos votado.
Alguien justo, alguien honrado,
que ponga el punto a la íes;
alguien en que usted confíe
el destino ciudadano,
que no lo trate de “hermano”
mientras le roba y le inhibe.

Buena idea un “encargado”
que administre este edificio
y otorgue algún beneficio
a enfermos y jubilados.
Que eleve al profesorado
a primera prioridad;
que promueva la igualdad
que a cierta parte se fue;
que acabe con la AFP
pa vivir con dignidad.

Un legítimo “encargado”
que no marche al precipicio
con zonas de sacrificio
ni mapuche asesinado.
Un humano equilibrado
que no sea figurón.
Sea mujer o varón,
no venga a saciar su apetito
ni ande haciendo “negocitos”
a costa’e su posición.

Así que preste atención,
pues el Gobierno valida
para Chile esta salida
que no requiere elección.
Esta nueva solución
que avala pa Venezuela,
nos evita gastar suelas
en marchas improductivas,
diciendo con voz altiva:
“¡Anda a cantarle a tu abuela!”.

En mi familia se enseña
lo que dijo el Presidente:(3)
que no es noble ni decente
opinar de casa ajena.
Para evitar la condena,
al cielo no hay que escupir,
porque se habrán de invertir
las vilezas que promueve.
No se queje si es que llueve
y no hay paraguas que abrir.

Notas

(1) Antes, autodenominado “Grupo de Lima”; hoy, Cártel confeso.
(2) Imperio. Tal cual lo lee: Imperio.
(3) Refiere al último Presidente de Chile y al Principio de No Intervención.
No confundir con los posteriores, que han sido Dictadores o Representantes comerciales de la oligarquía.

Jorge Lillo Valenzuela

Fuente:  Politika/La Pluma/Tlaxcala