Las fotos muestran entonces una ciudad que resiste de muchas maneras, la de quienes cada día se paran a vender comida, cortar cabello, subirse a un autobús, reunirse en el barrio, sortear el aumento de precios, la distancia de quienes se fueron.
El gobierno se muestra errático, promueve una conversación nacional sin mecanismos claros de negociación que es lo que pide la calle en movimiento. Los...
Tal vez buena cantidad de votantes antiautoritarios se vuelquen a la lucha por transformar la llamada “fiesta cívica” en una manifestación por Nunca Más terrorismo de Estado, no queremos más milicos, no queremos más ejércitos.