La matanza de Santa Bárbara parecía estar preparada de antemano. Aquel sábado 23 de febrero, al atardecer, el ejército, ante la carpa de los huelguistas, quiso sacar las volquetadas...
En conséquence, nous adressons un appel urgent à la communauté internationale pour exiger la protection des droits humains des manifestants et des manifestantes.