Solo una pieza del rompecabezas

Cuando tenemos en nuestras manos solo una pieza del rompecabezas, es difícil que podamos abstraer la figura completa a la cual pertenece.

Adriadna, Casandra y Medea

Introducción

El presente ensayo tiene el propósito de aportar argumentos a favor de la permanencia de la vida, cuando una encrucijada del llamado desarrollo, nos llama a optar entre devorar los recursos naturales en detrimento de la calidad de vida, o el usufructo de tales recursos en pro del bienestar de la sociedad viviente y las que luego vendrán.

Antes de entrar en materia una aclaración necesaria: el adjetivo que demos a la acción de usar los cultivos, es de cuño humano, no de la naturaleza; ella no ha evolucionado en especies lícitas o ilícitas, simplemente ha evolucionado; en consecuencia, estamos calificando para una cultura, que el uso de tales cultivos no es permitido. Atendiendo a las razones anteriores, en adelante hablaremos de cultivos de  cuya producción se hace un uso ilícito.

Cuando tenemos en nuestras manos solo una pieza del rompecabezas, es difícil que podamos abstraer la figura completa a la cual pertenece. El evento social de la proliferación de cultivos de cuya producción se hace un uso ilícito, expresado a secas, llama a medidas para erradicar el problema. Es decir, una reacción causa – efecto, la máquina, el engranaje perfecto.

Sin embargo, en la interacción de la sociedad con la naturaleza, pululan hilos que entretejen el sutil tejido de la vida. Para muestra un botón; del  mismo territorio, Cordillera Andina, extraen el alimento comunidades humanas para las cuales la coca es planta sagrada y comunidades humanas que la han declarado ilícita. Ambas tienen derecho a territorio y a cultura… es decir, la convivencia tiene que ampararse en el concepto tejido y no en el enfoque causa – efecto, so pena de continuar por la ruta de la imposición que incuba violencia.

A sabiendas de que la encrucijada mencionada anteriormente se encuentra en todas y cada una de las decisiones propias de la administración del planeta, hacer acopio de argumentos veraces, se torna imperativo. Nuestro ejercicio apunta entonces en esa dirección: traer para el análisis, otras piezas del rompecabezas valoradas desde la naturaleza, la vida, la dignidad humana y el sistema político, económico y social que nos alberga.

Ensayo integral formato PDF

Cristina Agudelo Mesa,  Lía Isabel Alvear Ramírez, Lilliam Eugenia Gómez Álvarez , para La Pluma, 18 de abril de 2006